Página editada por Antonio L. Manzanero, profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid. España

Una mujer y dos caras

EL HUFFINGTON POST

03/07/2015

Cuando ya parecía acallada la polémica sobre si el famoso vestido era blanco y dorado o azul y negro, una nueva ilusión óptica para volver a dejarnos con la boca abierta.
En esta ocasión se trata de una imagen dividida en dos mitades. En la parte izquierda hay una imagen de una mujer, como si fuera el negativo de un carrete fotográfico. La parte izquierda no es más que un espacio en blanco. Las instrucciones para poder apreciar la ilusión son las siguientes:
  1. Mira fijamente al punto blanco sobre la nariz de la mujer durante por lo menos 15 segundos.
  2. A continuación, posar la mirada sobre el área blanca de la derecha.

  3. Y... ¡sorpresa! ¿Qué ves?
ilusión óptica

El rostro de una mujer de pelo castaño debería aparecer durante unos segundos sobre esa superficie blanca. No se debe a ningún truco de la fotografía ni a ningún efecto sobrenatural; se trata de una ilusión óptica conocida como imagen residual negativa.
Sus causantes son unas células del ojo, las ganglionares, que son las encargadas de enviar información al cerebro codificando los colores en pares de colores primarios. "El código de todos los tonos que podemos percibir en el espectro de luz lo transmiten desde la parte posterior del ojo hasta el cerebro a través de tres canales neuronales", explicó el Doctor Juno Kim a Daily Mail Australia.
Un primer canal codifica los colores negro y blanco; el segundo, del rojo y el verde y el tercero, del azul y el amarillo. "Cuando miras algo amarillo, por ejemplo, durante un tiempo prolongado, se estimulan las células que son sensibles a ese color en el canal del amarillo y el azul", apuntó.
La actividad de esas células se incremente, pero después de un tiempo, se fatigan. "Cuando después de eso diriges tu mirada a un fondo uniforme, por ejemplo una pared gris, lo que ocurre es que la célula no vuelve a su estado de descanso, sino que su actividad decae mucho más. Es ese debilitamiento para codificar el amarillo lo que hace que la codificación del color opuesto se haga más fuerte, por lo que se verá azul", añadió Kim.
Lo que ocurre en esta imagen es que las células que identifican el azul, tras estar expuestas durante un tiempo a ese color, se fatigan y debilitan, estimulando la percepción de su contrario, el amarillo, por lo que se aprecia un tono de piel más natural.